El amor vence al dragón. Ahora le toca a Robi vencer…

Entrevista a Robi Draco Rosa

Las malas noticias son así. Llegan, no tocan la puerta, ni piden permiso. Así por así, le tocó el turno al cantautor puertorriqueño Robi Draco Rosa, autor de éxitos de Ricky Martín como “María” o “La Copa de la Vida”, y de otras celebridades. Una de esas noticias inesperadas le llegó: “Tienes cáncer”. Frío. El cantante de 41 años se le encontró un tumor canceroso en el abdomen cerca de su hígado. Cierto es que no ha muerto, pero la noticia no saca sonrisitas. Le pone a cualquiera cara de serio y le saca un “uy” a secas a cualquier garganta. A mí, además, me hizo desempolvar una entrevista realizada en 2009, en su última visita a RD. Publicada en la revista Estilos, para la que ese entonces laboraba. Ahora la comparto, porque desde siempre pensé que en ella Robi deja ver el tremendo talento y ser humano que es…

Al teléfono desde Los Ángeles, California, faltando poco para que cante en Hard Rock Café Santo Domingo, él se abre a una entrevista. ¿Qué se puede esperar?… Hasta rebeldía. Es Robi Draco Rosa, quien escribió Livin’ La Vida Loca de Ricky Martín y quien de niño llevaba un nombrecito tan común como Roberto Eduardo– por supuesto, en tierras gringas: Robert Edward— para luego cambiárselo por uno que lleva una palabra que le define, dragón, Draco; de los lanzan fuego si se proponen ir a la defensiva. Habla claro, sexy, medio ronco y con un lenguaje que combina el verso con lo urbano, como mezclar rock y mambo.

En un instante su acento boricua a ritmo de voladora de chofer que va tarde, puede apagarse; entonces puede aparecer su ‘yo de dragón oscuro’: Cuando le mencionas la palabra “comercial”, su lado artístico de compositor se ofende; y cuando le insinúas que las disqueras lo añoñan aunque no vende millones de discos, él recuerda el éxito comercial de “Más y más”, una canción que ya no disfruta; se ofende igual. Robi es de esos tipos a la que cualquier novia “en quille” le diría: ¡A ti no hay quién te entienda!, a seguidas de trancarle el teléfono, ¡plap!

Sólo cuando le explicas que tus preguntas no son mal intencionadas, entonces él cede y se baja. Ahí entiendes que sin ese fuego peligroso, Robi no hubiera podido ser ni Roberto, ni Robi Cornelio, ni Robi Draco Rosa ni Draco pelao’… porque, como él dice, “lo importante son mis composiciones, no mis nombres”… y aunque se lo cambie a igual ritmo que usa toallas en el baño, será el mismo: Un artista de alma encontrada, que pese a todo–siempre y cuando su dragón interno se calme– puede hacerte sentir que son conocidos de antaño, con profundo sentido poético, de extrema sencillez y tremendamente genial.

¿Comercial o personal? ¿Cómo le gusta más a Robi componer?

¿Comercial o personal?… [Como que no entendió… Sí, muchacho]
Bueno, es un poquito de todo ¿no? Creo que todo es personal, un intento de hacer público lo que uno está sintiendo en ese momento, y de vez en cuando llega la magia de que se comercialice…

Ahora, comercial o no, las disqueras no escatiman gastos contigo, provocas infarto en mujeres y la prensa se te avalancha; ¿qué es lo que tiene Robi?

Pues no sé. Óyeme, te hago una pregunta: ¿Tú has escuchado mis discos? [Oh, oh, se “quilla”]

Sí. Pero antes de convertir esto en un cuadrilátero, déjame aclararte: Para nadie es secreto que muchos artistas empiezan con calidad y que, por hacer dinero, se vuelven unos disparatazos; así que [a partir de aquí vocecita de gente ‘freca’] Robi, indicarte que no eres comercial, en este caso, es privilegio…

No, no, no… sí… Es cierto. Totalmente. Es verdad [Se ablanda como habichuela en olla de presión]

“Vagabundo por todo el mundo” es tu gira… No se si sabes que en Dominicana Vagabundo tiene dos connotaciones: una gente que no tiene dinero; o, una media chivírica. Ejemplo: “esa mujer es una vagabunda”… ¿Qué significa en el “Dracoccionario”?

Risas… risas… más risas… y luego responde: Mira, la connotación de vagabundo es como cuando los nazis usaban un símbolo que, originalmente, era de la paz, la esvástica. Luego llega este loco de Hitler, y de repente, todo el mundo lo asocia con otra cosa. Es percepción. Por mi lado, cuando veo el término vagabundo veo al nómada, el soñador que va por el mundo tratando de vivir sus sueños estando despierto… el aventurero, que da todo lo que tiene y va aprendiendo de toda la magia que le sucede… El poder de la palabra es una chulería; más lo es el poder distorsionarla, arreglarla…

Y de viajes sabes mucho… Naciste en Nueva York, te sientes puerterriqueño y amas lo brasileño… ¿Cuál es tu territorio?…

Sin duda, ¡soy boricua! Mis padres son de Puerto Rico, de descendencia española e italiana… ¿y yo? Nacido en Nueva York… papi era un salsero y de música clásica; y mami, una rockera… Soy un producto de ellos, en fin, soy como los “corchos rápidos” que andan por ahí… [En esta parte no hay que volverse loco por no entender la expresión; él quiso decir que es como reloj hecho en la globalización: sus piezas son suizas, pero se fabricó en China y se vende en Washington]

De esa descendencia nacieron esas canciones “mueve-caderas” como “un pasito pa’ lante María” o Livin’ La Vida Loca… ¿No te cansas de la sombra de Ricky Martín?

No, al contrario. Ahí vuelve lo que te dije hace ratito de la percepción. Mucha gente puede que lo vea así, yo lo veo como que son cosas que pasan y que en su momento son importantes, que te hacen sentir vivo.

Ummm, percepciones… ¿Se puede percibir que eres exigente o tienes mal genio? Eso, tomando en cuenta que a los 17 años abandonaste Menudo porque no te dejaban componer, y luego cuando ya componías para otros como Ricky, Ednita Nazario o Julio Iglesias quedabas disgustado con la forma en que eran interpretados, como salió en la prensa…

Es cierto lo de Menudo, lo demás, no. Eso fue una entrevista que le di a una chica de Colombia, y ella puso que dije eso…

Anjá, ¿y qué dijiste?

Dije que para mí es muy importante darle forma de principio a fin a una composición; porque ahí soy muy artesano, brego con una sola pieza. Escribo para una persona que tiene una cierta realidad; y eso, me llevaba tiempo. Entonces, me retiro de componer porque entre los sueños de mi familia estaba adquirir una finca, y desde entonces mi esposa y yo nos dedicamos a eso.

Vamos a ver: Que un artista lance un perfume, unos tenis, ropa… ya es como tubo para stripper, esencial; pero ¿ron y café?

Sí, el ron se llama “Vagabundo” y el café “Draco”. Todo empezó porque mi papá nació y se crió en el campo y es un cafetero. Y yo le dije: “si algún día podemos comprar una finca importante, vamos a sacar una marca de café”. Es un proyecto desde hace 15 años, por tanto, para nosotros es un logro enorme.

Y ya que café bien colao’ sale oscuro… Antes, así interpretabas; hasta que una fiebre reumática te dijo “acá”… ¿en qué marcó eso a tus dedos?

En que todo eso se convirtió en este disco: Amor vincit omnia (El amor todo lo vence, en latín) Yo tenía pensado hacer otro tipo de disco, pero todo se me ‘viró’ (volteó). ¡Y que bien!, porque de eso se trata la música; de mantener una cierta pureza de lo que está pasando con uno. De ahí sale “Esto es vida”, una pieza bonita que sé que a mucha gente le va a gustar.

¿Es vida que la fiebre reumática le dijera al Dragón “hágase el optimismo”?

Es cierto que en momentos difíciles uno se vuelve más espiritual, buscando la fuerza del más allá… Pero siempre he sido una persona bastante optimista, aunque siempre tengo la pena negra presente, porque pasan cosas en las que siento que la tristeza me persigue; pero sí, soy positivo, y más ahora que estoy en un buen balance…

¿Eso es porque estás conquistando a Europa? ¿Estás “picando” bien? Anda tuti…

(Risas) Sí, estoy en buen comienzo. Fui a París y Londres y espero regresar. A España hemos ido cuatro veces, y seguimos trabajando; así que hoy seremos mil y mañana seremos dos mil, por ahí vamos, ¿qué crees?

¿Yo? ¡Oh, oh! Claro, llévales ritmo a esos europeos para que aprendan a remenear esas caderas y digan: ¡uepa!

Risas… risas… no aguantó: carcajadas. [Confirmado. Es cierto: el buen balance lo tiene positivo…]

Ahora, tras ese diagnóstico esperemos que el Dragón –el Draco- siga pensando igual…

Imagen: Fuente externa

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